LA CULTURA NO DA VOTOS

Por Cuauhtémoc Miranda

NUEVAMENTE EL ÁMBITO CULTURAL se ve menospreciado por la mal llamada cuarta transformación, la fórmula es muy sencilla, como no da votos, se deja al final de las prioridades. Se ha mencionado en diversos medios que este sector tuvo un pequeño incremento en su presupuesto, pero en la aplicación la reducción es definitiva.

Para cultura los recursos ascienden a 13 mil 985 millones de pesos, y en el caso de ciencia el presupuesto para el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología es de 26 mil 573 millones de peso. Lo importante a visualizar, es que con el recorte a varios Fideicomisos, estos sectores tendrán que buscar el recurso y es claro que la Secretaria del ramo no se los dará, de ahí que aunque se haya tenido un ligero incremento, al momento de posibles asignaciones no alcanzará.

En un ejemplo de lo que puede pasar en varias instituciones, está el caso de la Fonoteca Nacional, de acuerdo con información pública, la institución en 2020 contaba con un aproximado de 120 personas laborando, la gran mayoría contratada por honorarios, por lo que con el recorte se quedaría con una quinta parte de la plantilla, poco más de 20 elementos de base. La pregunta sería, ¿con este personal alcanza para manejar el acervo auditivo más grande e importante de México? Tendrán que hacer milagros, expertos y estudiosos fonográficos, se verán sin empleo este 2021, deteniendo de tajo todos los proyectos que se tenían en materia de archivos auditivos. El la cantidad de sonidos que resguarda esta institución nos permite dimensionar el alcance que tiene, y es de enaltecerse todo el trabajo que se hace, será preocupante que no se pueda mantener en buen servicio esta casa de estudio por falta de presupuesto.

Este recorte que se dio, a través de la desaparición de Fideicomisos, dará al traste con miles de proyectos creativos y de investigación en el ramo de la cultura, cuántas instituciones como la Fonoteca verán limitando su presupuesto, como lo hemos dicho en este espacio, las formas no son las correctas, si existían áreas con malversación de fondos, a estas se tenía que reestructura, no quitar de la noche a la mañana el trabajo de mucha gente que sí apoyaba el quehacer cultural de este país que tanta falta hace.

En otro ejemplo claro de malos manejos en materia cultural, está el famoso “Proyecto Chapultepec” que de acuerdo con los datos publicados en el DOF, de los más de 13 mil millones asignados al sector cultural, la mayoría de los recursos están destinados a la Subsecretaría de Desarrollo, que a su vez los dirigirá a continuar con el proyecto “prioritario” Chapultepec, naturaleza y cultural. Este colosal intento cultural pretende albergar entre otras ideas, el Museo del Maíz, la Universidad de la Salud, un Centro de Cultura Política y hasta una Cineteca, estos serán solo algunos de los espacios que conformarán el Plan Maestro para la Rehabilitación del Bosque de Chapultepec, encabezado por el artista contemporáneo Gabriel Orozco. Si bien es rimbombante el proyecto, lo más probable es que termine siendo un elefante blanco difícil de llevar a cabo y difícil de mantener, si es que se termina en esta administración. Seguro este proyecto quedará en ruinas como lo está actualmente el intento de Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México. Magníficas ideas, pésimas ejecuciones.

Lo dicho, la cultura no da votos, de ahí el poco interés y apoyo a todas las áreas de la cultura, en medio de una posible pospandemia, los recursos fueron ocupados para otras “prioridades” tales como un tren, una refinaría y un intento de aeropuerto. El tiempo será el mejor juez.